jueves, septiembre 24

Apretón de manos irrefrenable :P

Hay momentos en la vida que te hacen ser feliz, y hay cosas en la vida que te hacen sentir bien....

Como por ejemplo: un apretón de manos... y un impulso. Y cuando ese impulso es I RRE FRE NA BLE... se transforma en un beso.
En la mejilla. Casto y puro.... meramente profesional... pero irrefrenable, y eso lo hace inolvidable y encantador, jojojo.

Nada que decir poh!
Satisfacciones laborales ;)

lunes, septiembre 21

The Ilavarasi in me...

He could always make it work... it was magic!
Maybe he still can, we haven't given it a try for a while.
But this time it wasn't him, it was what he had given me... the Ilavarasi in me.

I know I don't always feel like one, but I know she lives in me.
She was once lost in the woods, and came out of it untouched, unharmed, and with new strengths. She has faced demons, and defeated them. She has been wounded, and has healed. And since she was given to me, and since I was made her... I can pluck up the courage to do what I have to do and come out of it alive, no matter how long it takes to heal. Be the Ilavarasi I am, strong, caring, decided, loving, brave, full dreams, and with a lot of nerve.
Even if I have to convince myself that I am one, I gotta let her act.
So be it...

domingo, septiembre 6

Bloques y muros

Bloqueadores de la comunicación, una de mis especialidades.
Aunque trato de evitarlos y de revertirlos, dan la impresión de ser más fuertes que yo, al igual que esos malvados y malditos sentimientos que los provocan.
Tiempo y dinero invertidos en dejar de bloquear, meses y meses derribar muros sólo para volver a construirlos a la más mínima amenaza.
Amenaza de qué señor?? No lo sé... Amenaza al orgullo, a la seguridad, a la rutina y a la seguridad. Amenaza a la fantasía de esas cosas, de todas menos del orgullo y la rutina.

Malas costumbres y malos hábitos de bloquear, de cerrar, de alejar y no dejar entrar, de oponerse a los cambios y a la evolución. Mala costumbre heredada de procesos lentos, de adaptaciones demorosas y de equilibrios frágiles. De fantasías pueriles y estúpidas apariencias, personales y vicarias, construyendo una frontera que de nada sirve y que sólo daña, defendiendo yos alternativos que no viven en el mundo, y que no se atreven a ver brillar el sol, por un real temor a desvanecerse.