Estereotipos

Nunca me gustó el estereotipo de la gorda romántica. Desde chica lo vi en Carrusel y después en todos sus re-makes, así como en teleseries de todo tipo. La típica gorda que encuentra todo tan romántico y que sueña con corazones y amor todo el día. Será por eso que reniego tanto del romanticismo?? Nunca quise verme como una de ellas la verdad.

El tema es que... por más que reniegue, o me haga la ruda y todo lo demás, como diría Pumba en la canción Hakuna Matata "hay una alma sensible en mi gruesa piel" :P En serio, tampoco soy una mina rosada por la vida, más bien... lila, o un caleidoscopio de colores la verdad.

Tal vez por este mismo motivo, no sé, pero creo que no estoy muy acostumbrada a las galanterías, creo que las desestimo, tiendo a no verlas, así como los cumplidos. A veces me descolocan, aunque debo reconocer que me gustan. No necesariamente tiene que haber una intención distinta a la galantería misma, tampoco pa andarse pasando rollos por la vida.

Curiosamente hoy camino al trabajo pensaba en el estereotipo de la gorda romántica. Y durante el día, una galantería que me sonrojó y descolocó al mismo tiempo, sin la más mínima mala intención de su parte, creo que es sólo mi poca costumbre. Y nada, como se encontraron las dos cosas, decidí escribir sobre ello. Tal vez tenga más que decir al respecto, tal vez no. Lo que sé es que es algo que EN REALIDAD quería decir. Seguramente para no olvidarme, en este viaje de conocerme a mí misma.

Imagen tomada de aquí